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Existe un camino de luces que se precipita en polvo
Unas hojas de metal que taconean el camino 
Exhalan molinos del oeste en giros de solera 
Es un paisaje desértico de piel de tierra negra 

Sostenemos el horizonte en la palma de la mano sudada 
Abrimos y cerramos los ojos en carismático estado 
Ayer fue letras y ritmo, agua y anhelo 
Hoy es cuerpo, el calor del arte para otros 

La memoria es un tubo que se llena
(des)entierra 
desparrama 
sostiene en peonza al mundo 
La piedra volcánica sigue siendo testigo de la lava
Su sonido cruje y mientras cristaliza, la memoria sigue viva 
Mas por cuánto tiempo el ruido del mundo seguirá desempolvándose de la luz de su dicha, hecha, pincelada lunar en un paisaje de olivina

Sostener el candil de lo creado es poner las manos en cuenco y sorber el cielo 
Es un ciclo de amor propio que balancea la paleta del ocaso 

Tus manos de senderos -a veces- bailan el aire de otros alientos 
y mis sentidos en pilar saben que no es costumbre 
jugar a dibujar el mundo 

El charco apuesto, se ha quedado estancado en barcas sin remo ni vela 
en luto temporal de marea, balancea la brisa divertida 

Mientras tanto, en bis, el arroyo dibuja nubes en el cielo de los posibles

Las mujeres legionarias salen de la mina y construyen salas abiertas en asambleas 
risas, aplausos, los candados del camino rotos en belleza de mares esparcidos 

Y tus manos, tus dedos que bailan el aire en mis senderos 
y las palabras que brotan y rifan la dirección más corta para ser sopladas al viento o tiradas al agua dulce y salada 

En botellas de lejía de cientos de cuentos 
busco la anchura del mundo 
mas sigo 
más abrazo 
o comprender la contumeliosa percusión de las piedras en mi pecho
percutan, permutan, profieren 

El candor come el aire contenido 
Tal vez solo sea preferencia la que gira y enciende al sol 
Tal vez, saltar sea siempre un vacío lleno de confianza y posibilidades
y la confusión sea solo amnesia obligatoria del corazón que late vidrio
Tic tac del la táctica del mundo en almendras de canto.

#mujerdepalabra
Arte: Sebastián Delgado